¿Qué podría ser mejor que un buen paseo por el bosque para despejar la mente y recuperar fuerzas? La hermosa Candy, de 19 años, es una de ellas. Mientras deambula por el bosque, se encuentra con un pequeño arroyo y encuentra el lugar ideal para descansar un rato. Pero claro, el escenario ya estaba escrito, con la presencia de un chico que no puede evitar mirar a la joven en traje de baño. Lejos de asustarse por el mirón, le pide que se acerque para que él la cuide a ella y a su maravilloso culito.