Katie Kush está teniendo dificultades para convencer a su novio nerd Ricky, para que tenga relaciones sexuales, así que cuando vislumbra a Steve Holmes, el padre atleta de Ricky, y su enorme polla, está más que feliz de dejar que la maltrate. Ser dominado por Steve resulta aún más satisfactorio para Katie de lo esperado, ya que desbloquea su lado salvaje, lo que le permite ir y dominar a Ricky por separado de la manera que él siempre quiso.