Una verdadera traviesa que esta lujuriosa Anaïs… La jovencita rolliza de mirada traviesa esconde bien su juego y lidera su barco como nadie cuando llega el momento de pasar a la acción. En este escenario, recibe al amigo Antho que llega inesperadamente. Pero cuando comienza la conversación, este último le hace una pregunta atrevida: ¡si no está registrada en un sitio libertino! La respuesta no se hace esperar, pues la joven le ofrece todos sus orificios y le demuestra que es fan de la sodomía…