Ella es como un buen vino, esta puta Eva: ¡cuanto mayor se hace, mejor se pone! A los 35 años, este ícono del porno ya no esconde sus fantasías o deseos, prefiriendo ir directo al grano. De hecho, admite muy fácilmente que adora las prácticas con más fuerza que la media, ¡que es frente a la cámara o en su vida privada! Y frente a nuestro hombre, la joven sabía qué esperar… Debido a este último, obsesionado con las curvas de la perra, no escatima esfuerzos para sacudir la medida de lo posible e incluso se deja terminar con un chorreo de leche!