Cuando invitan a Oliver a la casa de su jefe para ver el partido, se da cuenta de que puede aprovechar la oportunidad para presentarle algunas ideas. Su jefe no quiere hablar de negocios hoy y le dice a Oliver que se relaje, así que Oliver va a la cocina a tomar una cerveza. ¡Él encuentra a una chica con todo tipo de cosas malas escritas en su cuerpo y resulta que su jefe le había ordenado que se divirtiera ese día! ¡Oliver pasa de los negocios a follar en poco tiempo!