Cuando Scarlett conoce a su futura suegra Caitlin por primera vez, se siente intimidada por la frialdad que emana de la madre de su pareja. Caitlin no puede permitirse que otro cazafortunas se aproveche de su hijo y le cuesta creer que las intenciones de Scarlett están totalmente respaldadas por el amor. Para poner a prueba a Scarlett, Caitlin exige que se desnude frente a ella para que pueda ver su verdadero yo.