A la sensual Kendra Sunderland le encanta burlarse de su novio Scott Nails con sus dos cosas favoritas: leche y su cuerpazo humeante. La mujer traviesa hace una broma épica, soplando aire en una jarra de leche para hacerla burbujear. Tan pronto como comienza a verter el líquido blanco sobre su pecho, sus tetas irresistibles aparecen a través de la tela húmeda de su traje de una pieza. Obviamente, Scott no puede resistirse a una actuación tan apasionante. Le pide a Kendra que se arrodille y le vierte la leche directamente en la garganta antes de permitirle que le haga una garganta profunda. Si juega bien sus cartas, Kendra podrá jugar con otro fluido: la carga cálida de Scott.