El pastor Rich se está preparando para su servicio dominical, pero hay un ruido extraño que rompe su concentración. Se asoma a la habitación de Ozzy y la encuentra masturbándose, lo que considera una invitación abierta para el Diablo. Él reza para que ella contenga estos pensamientos oscuros y lo logra, pero solo hay un problema, él también los tiene. Así que es hora de que ambos presten atención a las sensaciones de hormigueo dentro de sus cuerpos y se rindan a la naturaleza lujuriosa de una cogida santa.