Cuando Raúl Costa descubre que su hermanastra Eveline Dellai ha estado robando sus cosas y vendiéndolas por dinero para alimentar su adicción a las compras, amenaza con decírselo a sus padres. ¡Eveline le ruega que no lo haga, así que él dice que la única forma en que dejará pasar las cosas es si ella lo deja follarla duro!