Celestina tiene una condición muy particular: tiene un orgasmo con el mero roce de su cuerpo. En el consultorio del médico, la enfermera Ophelia le hace algunas pruebas, lo que pone a Celestina más cachonda. Sospechando de la condición del paciente, el doctor Marcelo entra e intenta hacer algunos controles adicionales, empujando a Celestina cerca de su clímax. Solo hay una salida a esta situación: un polvo de emergencia.