Lauren Phillips acaba de llegar a casa y está muy cachonda. Ella va directamente al dormitorio para darse placer deseando tener una gran polla que le dé crema en el coño mojado cuando un golpe en su puerta interrumpe su fantasía. Es un universitario vendiendo galletas. Esto es perfecto para que Lauren lo atraiga al interior para hornear algunas galletas frescas y pedirle que le proporcione esa crema que tanto anhela.