Vi a esta MILF caliente afuera sin máscara, así que me acerqué a ella y le dije que era un inspector de máscaras. Le dije que tendría que multarla con 200 euros por estar afuera y se asustó. Una turista de Italia, Jessy Jey no tenía 200 euros por una multa, así que le dije que podíamos llegar a un acuerdo, que si me mostraba sus grandes y falsas tetas, lo dejaría pasar. Cuando me las enseñó, le ofrecí 400 euros por una mamada. Entramos en un edificio cercano que conocía, y cuando vio lo grande y gruesa que era mi polla, se alegró de chuparla. Le pagué más para que le follara el coño, le comí el culo por detrás y luego me corrí en la boca.