Martin y yo vimos a esta linda rubia parada y elegantemente vestida. No hablaba inglés, pero traduciendo al checo, descubrimos que Lucky Bee estaba esperando a su novia. Como empleada de oficina, Lucky no ganaba suficiente dinero y sonrió tímidamente cuando le preguntamos si era fiel a su novio (hizo trampa). Por 4000 CZK, Lucky accedió a mostrarnos sus turgentes tetas y le ofrecimos 10K más por una mamada. Fuimos a un pequeño albergue que conocía cerca, y cuando saqué mi polla, ella jadeó de alegría…