A Nana Syren la convencieron para vender algunos masajeadores, pero no entiende completamente para qué sirven, por lo que le está costando venderlos. Juan, su nieto, le dice que en realidad son juguetes sexuales y le da una primera lección rápida sobre cómo usarlos. Más tarde, Juan invita a Nikki, la atractiva vecina MILF de al lado, para ver si Syren puede hacer su primera venta. Nana demuestra tener tácticas muy convincentes con Nikki mientras usa los juguetes sexuales y su lengua en el coño de Nikki. Juan se une a la diversión para follar a las dos atrevidas damas, sellando el trato con un increíble trío.