La MILF Alexis Fawx siempre está insatisfecha, pero todos los hombres del vecindario le tienen demasiado miedo a su marido para ayudarla. Cuando el atractivo Oliver Flynn toca el timbre mientras se frota el clítoris en la ducha, abre la puerta y estratégicamente deja caer su toalla. Oliver es más valiente que los demás, o tal vez solo tiene menos circulación en su cerebro porque todo está en su gran polla cuando ve las enormes tetas de Alexis, pero le da a la MILF cachonda la penetración de coño que ha estado deseando.
