La rubia de cola de cerdo Baby Sid está súper emocionada de escaparse el fin de semana, pero cuando llega al lugar donde se quedará, no tiene dinero para pagarla. Para compensar a su anfitrión, ella se ofrece a follarlo, y con sus impresionantes ojos azules y su figura curvilínea, él no puede decir que no. Él la lleva a la habitación y Baby se pone a trabajar, chupando su polla como si hubiera estado muriendo de hambre durante semanas. Luego, ella ofrece su dulce coño en el sofá y deja que nuestro semental la golpee desde atrás mientras ella gime en éxtasis. Coño es el mejor pago.
