A Kyler Quinn le encanta usar la ropa de su hermanastro Lucky Fae. Cuando Lucky sale y la encuentra vistiendo solo su camisa y una tanga, suspira y finalmente la confronta al respecto. Kyler afirma que le gusta usar su ropa porque huelen a Lucky y le gusta su olor. En respuesta, Lucky le dice a Kyler que el fetiche sexual de su familia reconstituida es extraño y que él solo quiere recuperar su camisa. Kyler se quita la camisa y sale de la habitación, en topless, mientras le dice a Lucky que puede tener lo que quiera cuando quiera…
Más tarde, Lucky encuentra a Kyler en su habitación tomando su ropa nuevamente. Ella le dice que necesitará algo grande, cálido y cómodo cuando esté embarazada del bebé que él le va a dar. Lucky está de acuerdo en que se follaría a Kyler, pero nunca se correría en ella. En respuesta, Kyler se arrodilla para que Lucky disfrute mirando ese coño y luego deslizando su polla hasta su casa para hacerla de perrito.